La deliciosa cuarta edición de Drawing Room 2019

La deliciosa cuarta edición de Drawing Room 2019

 

 

Los magníficos salones del Palacio Santa Bárbara en Madrid, un ejemplo de arquitectura isabelina,  han acogido la cuarta edición de Drawing Room, la única feria madrileña especializada en dibujo contemporáneo. «Hay cuarenta artistas de los cuales 17 tienen menos de 40 años. Y 18 son mujeres, casi la mitad», detalla la directora y fundadora de la feria -con edición en Lisboa también desde el pasado año-, Mónica Álvarez Careaga.

 

Palacio Santa Bárbara

 

En 2018, la feria se celebró en el magnífico Salón de Baile del Círculo de Bellas Artes pero la coincidencia  de la feria con su tradicional Baile de Carnaval ha impedido que  este año se pudiera celebrar allí. «Cuando me comunicaron que no nos podían prestar la sala por el baile de máscaras juro que me eché a llorar, porque se trata de un espacio muy amplio y en el que todo está en una sola planta.», dice Álvarez Careaga.

Y la entiendo porque, a pesar de que el palacio de Santa Barbara es un sitio estupendo, tiene bastantes limitaciones de espacio. En efecto, la feria lucía más en el Círculo donde las galerías estaban más claramente delimitadas y era más comprensible su atmósfera y su oferta, no como en esta otra ubicación en el que la escasez de espacio obligaba a un montaje comprensiblemente más complejo en el que varias galerías compartían una misma sala, aunque hay que reconocer que lo que se podía sentir como confuso en algunos casos, en otros la yuxtaposición proponía más que interesantes conversaciones. Por eso uno podía encontrarse con pasillos pasadizo con ofertas de esas que detienen a los espectadores, auténticos «salones» donde los diálogos entre las propuestas de las galerías creaban eficaces ambientes, y otros, no tanto. Una feria divertida con una propuesta rompecabezas que en el fondo le sienta bien a su modestia.  Felicidades a Mónica Álvarez Careaga. En chino, el ideograma para la palabra «crisis» se compone de dos elementos que  a su vez significan peligro y oportunidad

 

Mónica Álvarez Careaga, directora de la feria. Foto de M. Dorado (ABC)

 

Pues con aquellos peligros y otras tantas oportunidades, Drawing Room ha vuelto a cosechar una propuesta muy interesante en su concisa y sobria modestia. Fue una verdadera delicia visitarla en una de aquellas mañanas de primavera anticipada  y pude ver obras maravillosas y muy delicadas y, como suele suceder en esta feria, muchas de las más atractivas eran obras de interesantes mujeres . Una feria, por cierto, que como ya he dicho y como también JustMad por otra parte,  prácticamente ofrecía una muy cercana paridad entre hombres y mujeres artistas. 18/40 . Algo nada extraño ya que Álvarez Careaga también dirigió el festival (ahora Bienal)  Miradas de Mujeres en 2014.

Almudena Lobera en el espacio de Ogami Press en Drawing Room

Hay en la página de Arteinformado una visita comentada de la propia Álvarez Careaga de 40 obras de la feria que seguramente use en mis propios comentarios. ¿De quién mejor beber?

Empiezo por la obra que os puse más arriba Imagine Corpore I (2014) de Almudena Lobera, un misterioso políptico gráfico en el que la imagen de un paisaje se desvanece a medida que se repliega, toma volumen, se abstrae y se transforma en cuatro elementos que acompañan a un plegado real. Hace referencia la artista a mi admirado orfebre de la corte de Dresde, Wentzel Jamnitzer.

 

Alberto CORAZON Alhambra en duermevela II, 2018.Monotipo en papel japonés, 136 x 96 cm. Cortesía- Ogami Press, Madrid

 

Coincidía Almudena Lobera, en la Galería Ogami, en la mejor sala de la Feria, un «salonazo » en toda regla, que incluye además a la interesante Galería Pepita Lumier de Valencia donde se podían ver los cautivadores dibujos a boli bic de Nuria Riaza, además de un monotipo en papel japonés sobre La Alhambra de Alberto Corazón y las esculturas de Pedro Cembranos.

 

Nuria Riaza. Las golondrinas. 2018

Un bolígrafo BIC de color azul es en efecto la herramienta principal de Nuria Riaza para crear, técnica que comparte con mi admirada Consuegra Romero, aunque sus obras provienen de un muy distinto lugar y, sin embargo, ambas comparten una reivindicación de un universo femenino vigoroso y activo.

 

Con la serie Las Golondrinas pretende reunir a todas aquellas mujeres guerracivilistas, las que lucharon en los frentes con las que bordaban sus mantelerías a punto de cruz esperando como Penélopes. Las mujeres esperando como las flores secas, dice por algún sitio.

 

Jorge Drexler. Salvavidas de Hielo

 

Una delicia y casi un alarde de técnica para esta artista ya de largo recorrido. Muy recomendable el vídeo Telefonía y todo el trabajo que realizó para el disco de Jorge Drexler Salvavidas de Hielo.

 

JOSÉ LOUREIRO Ácaros, 2018. Óleo sobre papel, 102 x 73 cm. Cortesía- Fonseca Macedo – Arte Contemporânea, Ponta Delgada JOSÉ LOUREIRO

 

Espectaculares los «ácaros» de José Loureiro en la galería portuguesa Fonseca Macedo, unos «seres» entre humano, mineral, vegetal y animal que eran muy hermosos y coloristas.

 

Sobre la llanura, 2018. Acrílico sobre muro, 300 x 300 cm. Cortesía- Ruiz Linares, Granada

 

Más allá las apocalíticas viñetas de Cristina Ramírez en la Galería Ruiz Linares, unas fuerzas de orden sobrenatural que irrumpen en el plano de la existencia ordinaria, combinadas con las dulcificadas y siniestras acuarelas  sobre la última obra  de Robert Louis Stevenson  “Our Men in Tahiti” de Simon Zabell que creo que ya había visto en otra de las ferias.

 

Simon ZABELL Our men in Tahiti, 2018. Acuarela sobre papel, 24 x 32 cm. Cortesía- Ruiz Linares, Granada

Llegábamos así a lo más transitado de la feria el largo pasillo informal que conectaba las galerías Silvestre (Madrid),  Granada (Buenos Aires), Lucía Mendoza (Madrid) y Yusto/Gíner ( Marbella). Empezaba este concurrido pasadizo con la obra preciosista y al mismo tiempo desoladora de Irene González donde la memoria y el silencio toman cuerpo en delicados dibujos de una extraordinaria factura técnica.

 

IRENE GONZALEZ PRESERVACIÓN DE LA MEMORIA

 

Un poco más allá el inconfundible universo de Edgar Plans donde las ideas que el artista ha anotado en su libreta explotan literalmente en el lienzo y desbordan los marcos ocupando las propias paredes de la galería Granada de Buenos Aires

 

Un visitante contempla una de las obras de Edgar Plans – Foto de M. DORADO (ABC)

 

En la Galería Lucía Mendoza la gente se detenía para ver con luz fluorescente los 223 nombres con los que las industrias alimentaria y cosmética camuflan la  presencia del aceite de palma sobre unos dibujos de inspiración botánica. Una obra de Luna Bengoechea con la que fascinaba al «respetable».

 

Luna BENGOECHEA Elaeis Guineensis bulbo, 2018. Tinta negra y tinta sensible a la luz UV sobre papel Fabriano, 100 x 80 cm. Cortesía- Galería Lucía Mendoza, Madrid

 

Y acababa este feraz recorrido en la interesante propuesta de la Galería Yusto Giner de Marbella con obras en latón de Beatriz Ros, un interesantísimo dibujo de Emmanuel Lafont y los materiales orgánicos de Victoria Maldonado.

 

Beatriz_ROS

 

Emmanuel LAFONT Maasmechelen I, 2018. Carboncillo sobre tela, Cortesía- Galería Yusto:Giner, Marbella

 

 

Por último de ese primer piso destacar las hipnóticas piezas de John Franzen de sus series Each line, one breath en la Yoko Ohuda Gallery de Lieja (Bélgica) en las que el patrón cuasiautomático de cada línea viene dictado por la línea anterior y todo ello, como el título apunta, asociado a la respiración. Hay algunos vídeos de él haciéndolos que podéis ver pinchando aquí.

 

John FRANZEN Each line one breath

Del piso bajo, destacaría la fascinante pieza que presenta Set Espai d´Art (una de mis galerías favoritas este año si tenemos en cuenta lo visto aquí y en JustMad) de Rubén Tortosa relacionada con las investigaciones surgidas del acto de mirar a partir de dispositivos tecnológicos.  La instalación The Bird: the journal of the image está compuesta por una máquina de dibujar a partir de un sistema cartesiano de tres ejes, conectada a una fuente de datos con la geolocalización diaria de un ave rapaz protegida, en un espacio temporal de un año. Fascinante imaginar al ave mientras aquel artefacto intermitentemente se movía.

 

Ruben TORTOSA The Bird: the journal of the image, 2018.  Cortesía: Set Espai D’Art, Valencia

 

En esa sala además podemos ver los escombros en tinta china de Fernando Martín Godoy y  la fragilidad posminimal de Teo González en la Galería La Casa Amarilla de Zaragoza y un impresionante tonoma de Mizuyo Koyama, una liberadora del sho (la caligrafía tradicional japonesa) en la  Gallery Kitai de Tokyo

 

Fernando MARTIN GODOY Desastre, 2019. Tinta china sobre papel, Cortesía- Galería La Casa Amarilla, Zaragoza

 

Teo_GONZALEZ_Arch_Drawing_3_2015_Courtesy_La_Casa_Amarilla

 

De entre las galerías portuguesas destacar  el trabajo de Marco Moreira en Módulo (Lisboa) y la obra de Bárbara Assis Pacheco en la Galería Monumental.

 

Marco MOREIRA Sin título, 2018. Grafito sobre papel Fabriano, 90 x 70 cm. Cortesía- Módulo – Centro Difusor de Arte, Lisboa

 

Y para acabar los extraños dibujos de un mundo de fantasía de Hans Lemmen y los mapas invadidos por seres monstruosos del canario Marco Alom en la Galería Arizar de Tenerife.

 

Hans Lemmen

 

marco alom

 

marco alom

Una gozada de feria. Felicidades a la organización.

1 comentario

Los comentarios están cerrados.