Ortiz Echagüe, un maestro de la fotografía española del s. XX
José Ortiz-Echagüe Puertas (1886 –1980) ingeniero militar, piloto, gentilhombre de cámara con ejercicio del Rey Alfonso XIII, hermano del pintor Antonio Ortiz-Echagüe , y, sobre todo, un extraordinario fotógrafo hasta el punto que algunos críticos le han considerado el mejor fotógrafo español hasta su momento, lo cual es tremendamente meritorio porque para él la fotografía fue una afición a la que dedicaba sólo los ratos libres, especialmente los fines de semana y durante sus viajes. Su fama fue internacional hasta el punto de que en 1935 la revista American Photography lo consideró uno de los tres mejores fotógrafos del mundo.
En algún sitio he leído que la familia ya consideraba que un hijo artista, su hermano Antonio, ya era calamidad suficiente y que por esa razón le regalaron una cámara a los 12 años. Para que no pintase…Su primera fotografía conocida es esta Sermón en la aldea de 1903
Desde el punto de vista artístico y por su temática se le puede considerar relacionado con la generación del 98. Se le suele encuadrar en algo llamado pictorialismo fotográfico español , a saber, el estilo de aquellos fotográfos que, a finales del siglo XIX, imitaban a la pintura en sus imágenes como reacción a la fotografía de lo cotidiano, que consideraban vulgar.
Sin embargo, él siempre detestaba esa etiqueta. «Lo que quiso es plasmar, con una visión artística, las costumbres, gentes y lugares de la España que estaban desapareciendo», explica Ignacio Miguéliz , responsable del área curatorial de la flamante nueva sala permanente que el Museo de la Universidad de Navarra , depositaria de gran parte de su legado -posee más de 1000 originales-, ha inaugurado este mismo mes de marzo y dedicada, por petición popular, de forma permanente a la obra de Ortiz Echagüe .
Echagüe muestra según Migueliz, un propósito documental, pero sin técnicas documentales. Para conseguirlo, se presentaba en los pueblos y hablaba con los paisanos « para que se pusieran los trajes tradicionales y actuasen como si estuviesen en las fiestas «. Una puesta en escena , pero « con personajes reales y en su entorno real».
A lo largo de 75 años realizó miles de fotografías. Revelaba él mismo sus negativos usando una técnica al carbón fresson , corriente en su juventud aunque pronto quedó desfasada. Él la usó en toda su obra artística, lo que daba un especial matiz a sus positivos, retocándolos a veces con pincel, así como un mayor contraste, que hace que sus obras sean fácilmente reconocibles. Su producción es enteramente en blanco y negro.
Tanto la fabricación del papel como el procedimiento de obtención de fotografías requerían mucha paciencia, una extraordinaria habilidad y un perfecto manejo de la técnica por lo que, con el paso de los años y a medida que se simplificaban los procesos fotográficos, los pocos fotógrafos que lo utilizaban lo fueron abandonando.
Él mismo hizo una clasificación de sus obras al agruparlas en cuatro libros: Tipos y Trajes (1930),
España, Pueblos y Paisajes (1939),
España Mística (1943) -se puede ver el libro entero pinchando en el título-
y España, Castillos y Alcázares (1956).
A estas colecciones se deben añadir otras dos series: Marruecos y fotos familiares .
Como ingeniero militar, «fue enviado al Rif en 1909, a la unidad de globos aerostáticos, para tomar fotos del enemigo, pero durante su estancia tomó algunas de sus más hermosas fotografías.
Su afán aventurero le llevó a Ortiz Echagüe a formarse como piloto siendo el tercer español que logró ese título. En 1923, fundó la empresa Construcciones Aeronáuticas (CASA) y llegó a ser el primer presidente de la automovilística Seat, en 1950.
Tuvo un gran reconocimiento internacional. En 1928, expuso en Turín, pero después lo haría en Los Ángeles, Berlín, Londres, Milán, Washington, México… hasta culminar en su gran éxito internacional que supuso la muestra en el Metropolitan Museum de Nueva York, en 1960 , y la posterior de la Biblioteca Nacional, en 1962 .
Sin embargo, paradójicamente, es, a partir de ese momento de gloria, cuando se le empieza a considerar anticuado y sus técnicas obsoletas. Los nuevos fotógrafos documentalistas buscaban un verismo mayor e incluso la figura de Echagüe se ve, de algún modo, asociada a una especie de fotógrafo del régimen .
Habría que esperar a la década de los 80 y 90 para su completa revalorización culminando en la exposición antológica que el Museo Reina Sofía le dedicó en 1999. Hoy es considerado, sin ninguna duda, uno de los mejores fotógrafos españoles del siglo XX
Buenos días, me pongo en contacto con ustedes para compartir la exposición digital en el Instituto Cervantes de Vicente Martinez Sanz fotógrafo valenciano del período de entreguerras.
https://cvc.cervantes.es/artes/fotografia/martinez_sanz
Nos gustaría que recogieran, si es posible, alguna referencia sobre el artista en su página web.
Un saludo
http://martinezsanz.com/es/inicio/